Closes
Si estás planeando una escapada a Edimburgo, no te puedes perder los closes. Los closes son unos callejones estrechos que se encuentran en la ciudad y que conforman varios de los puntos de interés más interesantes e imprescindibles. Uno de los aspectos más curiosos de estos closes, es que algunos de ellos, cuentan con unas pequeñas historias, que hacen todavía más interesante su visita. Veamos algunos de ellos que no te puedes perder si visitas la ciudad.
Tweeddale Court
Situado en frente del Scotthish Storytelling Centre se encuentra uno de los callejones que alberga más misterios de la ciudad. Cuenta la historia que en este callejón tuvo lugar en su día uno de los asesinatos que nunca se pudo resolver en Edimburgo. Un mensajero del banco fue acuchillado con más de 4.000 libras en efectivo que mucho tiempo después, se descubrió oculto en una pared. El callejón fue construido durante el siglo XVI y además se cuenta que una de las murallas que lo sustenta, forma parte de la King’s Wall, una de las murallas más antiguas de toda la ciudad.
White Horse Close
Este close, se encuentra cercano al final de la Royal Mile y cuenta con el privilegio de ser uno de los callejones más bonitos que nos podemos encontrar en Edimburgo. El nombre del callejón se debe a una posada que en su día ofreció whisky y comida a todos aquellos viajeros que venían en su búsqueda. En su día fue bastante transitado por ese motivo, además de ser el punto de partida de muchos transportes que conectaban toda la ciudad de Edimburgo. A día de hoy, está compuesto por una gran cantidad de casitas, cada una más bonita que la anterior.
Mary King’s Close
El callejón de Mary King’s Close es uno de los más famosos que nos podemos encontrar en Edimburgo. Este callejón esconde muchos secretos sobre las enfermedades y pestes que en su día agitaron la ciudad. Su nombre se debe a una de sus ciudadanas más importantes y pese a estar cerrado al público muchos años, en 2003 se abrió de nuevo para el disfrute de los turistas con mucho éxito, ya que se trata de uno de los callejones con más éxito y más transitado. Uno de los lugares de refrencia para conocer la Edimburgo subterránea.
Dunbar’s Close
Es posible disfrutar de bellos jardines en estos callejones y buena prueba de ello es el callejón de Dunbar’s Close. El callejón debe su nombre al escritor David Dunbar, ya que poseía viviendas a ambos lados de este. A día de hoy, el principal atractivo del callejón es el magnífico jardín inspirado en el siglo XVII que esconde, un pequeño pulmón verde en medio del bullicio de la Royal Mile. El callejón estuvo habitado por el escritor en 1773 y a día de hoy es posible encontrarnos con un jardín que trata de asemejar a lo que en su día fue. Una pequeña visita al pasado mientras disfrutamos de la naturaleza en medio de toda una área urbana de gran recorrido.